El diagnóstico precoz de los pacientes con enfermedad de Alzheimer (EA) supone un constante desafío.Se estima que entre un 10-20% de los pacientes diagnosticados de EA en realidad no la presentan en el estudio anatomopatológico y que un 33% de pacientes con síntomas leves no pueden ser diagnosticados de EA. Por ello, los marcadores biológicos se han propuesto como una solución a este problema.
Recientemente ha sido publicado un estudio, todavía preliminar, (JAMA. 2011;305(3):275-283) de un nuevo biomarcador (Florbetapir-F 18) para su uso en imágenes por Tomografía por emisión de positrones (PET). Los autores demuestran en el estudio una correlación de las imágenes de Florbetapir-PET "in vivo" con la densidad de beta-amiloide en los estudios necrópsicos postmorten.
El Florbetapir se une al Compuesto B Pittsburgh como marcador para imágenes de PET que muestra la presencia "in vivo" de los depósitos cerebrales de beta-amiloide propios de la EA. La ventaja del Florbetapir-F 18 con respecto al Compuesto B Pittsburgh, es que este último al usar el Carbono-11 como isótopo presenta una menor vida media (20 minutos) que el Fluor-18 (isótopo del Florbetapir).
Los estudios previos demostraban la alta afinidad y especificidad del Florbetapir con el Beta-amiloide. Además, su rápido aclaramiento (en el caso de que no se haya fijado al beta-amiloide) cerebral lo hace ser un excelente biomarcador para su uso en el PET.